Esta última píldora de hoy 23 de noviembre de 2014 servirá para contrastar lo que el mundo dice con sus dichos con respecto a lo que dice la Palabra de Dios.
Nuestro último argumento es "da que te vienen dando". Veamos qué dice la Palabra de Dios en Romanos 12: 21 (RV 1969), "No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal".
Es muy común ver cómo el enemigo siembra cizaña en los corazones de mucha gente, lo que a su vez conlleva a una reacción negativa ante las demás personas, siempre pagando mal por mal. Y muchas veces caemos víctimas de ese sistema por desconocer lo que Dios nos enseña en el manual de vida de todo creyente: la Biblia.
El creyente no puede caer presa del sistema que opera en el mundo, dejándose llevar por esa corriente de maldad, pagando mal por mal. Hay que romper esas cadenas de iniquidad y vencer el mal con el bien, aún cuando tengamos que ir en contra de cualquier argumento. Hay muchos pasajes en la Biblia que nos exhortan a hacer siempre el bien, pero quizá el que más me impacta se encuentra en 2 Tesalonicenses 3: 13 (NTV), "En cuanto al resto de ustedes, amados hermanos, NUNCA SE CANSEN DE HACER EL BIEN". La única manera de vencer la maldad es haciendo siempre lo contrario a los deseos de la carne y hacer lo que nos diga el Espíritu Santo de Dios.
En muchas ocasiones yo mismo he sido probado en este aspecto, especialmente cuando voy en la calle conduciendo y debo ceder el paso a otro conductor o a un motorizado. La corriente de este sistema nos dicta que uno siempre tiene más prisa que los demás, entonces ¿por qué razón debo cederle paso? Porque es lo correcto. Quizá algún día te tocará predicarle a esa persona de Cristo y ¿qué clase de testimonio le dejaste?. Hay que vencer lo malo haciendo el bien, lo que es correcto, y lo que yo termino haciendo es ceder el paso, así empiezo por marcar yo una diferencia en la carretera, ¿de qué manera estás marcando tú la diferencia? ¿Cómo estás venciendo el mal? No necesariamiente debe ser en la calle, también puede ser en tu sitio de trabajo, en tu salón de clases, en el lugar que te encuentres, VENCE EL MAL CON EL BIEN. Que tu testimonio impacte y marque una diferencia en la vida otros.
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Dios te guarde y te bendiga.
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