Un Encuentro Sobrenatural
En ocasiones el creyente pasa mucho tiempo al interior de la iglesia sin conocer realmente quién es Dios. Lo que hace que le conozcamos son dos cosas bien fundamentales:
Uno, intimar con Él (Proverbios 8:17), lo cual requiere de mucho tiempo de oración y búsqueda, por otro lado. Póngase a pensar por un instante si tuviera una relación, ya sea de amistad o de noviazgo, en la que nunca hablara con la otra persona, ni le dedicara tiempo… ¿Será que puedes afirmar que conoces bien a esa persona?.
Y dos, meditar en Su Palabra de día y de noche (Josué 1:8), pues cuando lo hacemos en medio de la búsqueda logramos entender mucho más cuál es el propósito por el cual hemos sido rescatados, y llamado conforme a Su voluntad. Así que si no estás haciendo ninguna de estas dos cosas, lo más probable es que no puedes saber: (1) quién es Dios realmente, (2) cuál es tu propósito aquí en la tierra. Si deseas conocerle de verdad, debes poner en práctica esas dos cosas más a menudo, ellas deben convertirse en un estilo de vida para ti.
¿Qué dice la Palabra de Dios al respecto?:
"Más alábese en esto el que se hubiere de alabar: en entenderme y en conocerme que YO SOY JEHOVÁ" (Jeremías 9:24).
A muchos creyentes de la iglesia de hoy les hace falta intimar más con Dios, dedicarle más tiempo a la meditación de Su Palabra. ¿Pero cuál podría ser una de las razones por lo cual no lo hacen? Quizá, porque se habituaron a recibir o a escuchar palabra en un servicio durante una escuela dominical y olvidaron su primer amor: aquel que sólo se da en la intimidad, aquel que se da en el lugar secreto, pero ¿cómo así, cuál lugar secreto? Vayamos rápidamente a Mateo 6:6, “mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en lo secreto”, ese es el sitio donde todo empieza.
Si nunca has tenido un lugar secreto, entonces es hora de buscar uno en tu casa y apartar el tiempo, que será sagrado, para orar e intimar con Jehová Dios. Si, por el contrario, lo tuviste y lo descuidaste, es hora de volver a él y retomar lo que habías empezado. Como creyentes debemos anhelar un encuentro sobrenatural con Jehová Dios para conocerle y entenderle de verdad, así como lo dice la Palabra en Jeremías 9:24.
¿Quisieras experimentar un encuentro sobrenatural en la presencia de Dios? Entonces ya es hora de regresar al lugar de intimidad.
Dios te bendiga sobreabundantemente en este día. Si te ha gustado este mensaje, click en ME GUSTA. Si deseas ser de bendición para otros hoy, click en COMPARTIR.
En ocasiones el creyente pasa mucho tiempo al interior de la iglesia sin conocer realmente quién es Dios. Lo que hace que le conozcamos son dos cosas bien fundamentales:
Uno, intimar con Él (Proverbios 8:17), lo cual requiere de mucho tiempo de oración y búsqueda, por otro lado. Póngase a pensar por un instante si tuviera una relación, ya sea de amistad o de noviazgo, en la que nunca hablara con la otra persona, ni le dedicara tiempo… ¿Será que puedes afirmar que conoces bien a esa persona?.
Y dos, meditar en Su Palabra de día y de noche (Josué 1:8), pues cuando lo hacemos en medio de la búsqueda logramos entender mucho más cuál es el propósito por el cual hemos sido rescatados, y llamado conforme a Su voluntad. Así que si no estás haciendo ninguna de estas dos cosas, lo más probable es que no puedes saber: (1) quién es Dios realmente, (2) cuál es tu propósito aquí en la tierra. Si deseas conocerle de verdad, debes poner en práctica esas dos cosas más a menudo, ellas deben convertirse en un estilo de vida para ti.
¿Qué dice la Palabra de Dios al respecto?:
"Más alábese en esto el que se hubiere de alabar: en entenderme y en conocerme que YO SOY JEHOVÁ" (Jeremías 9:24).
A muchos creyentes de la iglesia de hoy les hace falta intimar más con Dios, dedicarle más tiempo a la meditación de Su Palabra. ¿Pero cuál podría ser una de las razones por lo cual no lo hacen? Quizá, porque se habituaron a recibir o a escuchar palabra en un servicio durante una escuela dominical y olvidaron su primer amor: aquel que sólo se da en la intimidad, aquel que se da en el lugar secreto, pero ¿cómo así, cuál lugar secreto? Vayamos rápidamente a Mateo 6:6, “mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en lo secreto”, ese es el sitio donde todo empieza.
Si nunca has tenido un lugar secreto, entonces es hora de buscar uno en tu casa y apartar el tiempo, que será sagrado, para orar e intimar con Jehová Dios. Si, por el contrario, lo tuviste y lo descuidaste, es hora de volver a él y retomar lo que habías empezado. Como creyentes debemos anhelar un encuentro sobrenatural con Jehová Dios para conocerle y entenderle de verdad, así como lo dice la Palabra en Jeremías 9:24.
¿Quisieras experimentar un encuentro sobrenatural en la presencia de Dios? Entonces ya es hora de regresar al lugar de intimidad.
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Así mismo es. Muchos nos acostumbramos a la prédica del domingo. Y creemos que ya tuvimos un encuentro con Dios. Se necesita de una comunión diaria, íntima, personal con El.
ResponderBorrarAsí es Ismael. Gracias por dejarnos tu comentario. Bendiciones y paz.
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