Hoy el Señor me ha regalado una
Palabra que sé les hablará a sus vidas y les va a edificar tremendamente a nivel espiritual. Por si no lo has notado, Dios tienen un propósito bien grande contigo para este 2014 y Su deseo es levantar a Su pueblo en victoria para
prepararles para lo que viene, además también desea restaurar y reedificar todo
aquello que Satanás creyó haber destruído.
La Palabra de hoy está en:
Efesios 4: 22 - 24
22 En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, 23 y renovaos en el espíritu de vuestra mente, 24 y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad.
Hay tres cosas que Dios quiere decirte hoy con esta palabra:
Primero, de modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas (2 Corintios 5: 17). A muchos Cristianos se les olvida que son nuevas criaturas y les cuesta mucho trabajo despojarse del viejo hombre, les cuesta trabajo renunciar a muchas cosas de su vida pasada. Por ello, es que debemos despojarnos de ese viejo hombre porque está viciado conforme a los placeres del mundo y de la carne. Cuando nos negamos a los placeres de la carne es porque hemos aprendido a aborrecer lo que Dios aborrece y es entonces cuando empezamos a vivir una vida agradable ante los ojos de Dios y aprendemos a amar lo que Él ama. El viejo hombre es como un "cerdo", al cual le gusta revolcarse en el fango, y ese fango es tipología del pecado que encontramos en el mundo físico. Despojarse del viejo hombre quiere decir quitarse ese vestido. Es hora de ponerse el vestido de la justicia y de la santidad de la verdad que Dios te ha regalado.
Lo segundo que deseo compartirles hoy es que, debemos renovar nuestra mente y nuestro entendimiento. No podrás entender cuáles son los propósitos que Dios tiene para tu vida si sólo te despojas del viejo hombre y no de tu viejo entendimiento. Lo uno conlleva a lo otro, cuando empiezas a tener una mentalidad de Reino entiendes TODO más claramente y te es más fácil guardarte para Dios y hacer lo que Él te dice. Quizá muchos Cristianos fallamos al principio porque sólo nos despojamos del hombre viejo, pero no renovamos ni nuestra mente ni nuestro entendimiento. Renovar ambas cosas significa sincronizar tus pensamientos y tu voluntad con la de Dios para que Su propósito pueda cumplirse en tu vida. Cuando entendemos cuál es la buena voluntad, perfecta y agradable de Dios, nada nos podrá separar de Él.
Por último, cuando alguien se despoja de algo ¿cómo queda? Desnudo, ¿cierto?. Eso quiere decir que debemos tener otra vestimenta. Y esa es la que habla Efesios 4: 24, vestíos del nuevo hombre. Dios no te quiere hacer criatura nueva con un vestido viejo. Él quiere que todo sea nuevo en ti, el vestido, la mente y el entendimiento. El hombre nuevo que Dios quiere que alcances tiene esas particularidades, pero también tiene ciertas características que lo hacen semejante a Su creador, estas son: justicia y santidad de la verdad. Según el DRAE, un hombre justo se define así que vive según la ley de Dios.
Efesios 4: 22 - 24
22 En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, 23 y renovaos en el espíritu de vuestra mente, 24 y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad.
Hay tres cosas que Dios quiere decirte hoy con esta palabra:
Primero, de modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas (2 Corintios 5: 17). A muchos Cristianos se les olvida que son nuevas criaturas y les cuesta mucho trabajo despojarse del viejo hombre, les cuesta trabajo renunciar a muchas cosas de su vida pasada. Por ello, es que debemos despojarnos de ese viejo hombre porque está viciado conforme a los placeres del mundo y de la carne. Cuando nos negamos a los placeres de la carne es porque hemos aprendido a aborrecer lo que Dios aborrece y es entonces cuando empezamos a vivir una vida agradable ante los ojos de Dios y aprendemos a amar lo que Él ama. El viejo hombre es como un "cerdo", al cual le gusta revolcarse en el fango, y ese fango es tipología del pecado que encontramos en el mundo físico. Despojarse del viejo hombre quiere decir quitarse ese vestido. Es hora de ponerse el vestido de la justicia y de la santidad de la verdad que Dios te ha regalado.
Lo segundo que deseo compartirles hoy es que, debemos renovar nuestra mente y nuestro entendimiento. No podrás entender cuáles son los propósitos que Dios tiene para tu vida si sólo te despojas del viejo hombre y no de tu viejo entendimiento. Lo uno conlleva a lo otro, cuando empiezas a tener una mentalidad de Reino entiendes TODO más claramente y te es más fácil guardarte para Dios y hacer lo que Él te dice. Quizá muchos Cristianos fallamos al principio porque sólo nos despojamos del hombre viejo, pero no renovamos ni nuestra mente ni nuestro entendimiento. Renovar ambas cosas significa sincronizar tus pensamientos y tu voluntad con la de Dios para que Su propósito pueda cumplirse en tu vida. Cuando entendemos cuál es la buena voluntad, perfecta y agradable de Dios, nada nos podrá separar de Él.
Por último, cuando alguien se despoja de algo ¿cómo queda? Desnudo, ¿cierto?. Eso quiere decir que debemos tener otra vestimenta. Y esa es la que habla Efesios 4: 24, vestíos del nuevo hombre. Dios no te quiere hacer criatura nueva con un vestido viejo. Él quiere que todo sea nuevo en ti, el vestido, la mente y el entendimiento. El hombre nuevo que Dios quiere que alcances tiene esas particularidades, pero también tiene ciertas características que lo hacen semejante a Su creador, estas son: justicia y santidad de la verdad. Según el DRAE, un hombre justo se define así que vive según la ley de Dios.
Vivir según la ley de Dios es vivir de
acuerdo a sus preceptos y no los tuyos, ni los míos, ni los de tu pastor, ni
los de nadie. Igualmente se refiere a ser santos, a guardarnos para Él, pero esta es
una práctica de todos los días, no hay que bajar la guardia porque dice la Palabra que el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quién devorar (1 Pedro 5: 8).
El tiempo de despojarse del viejo hombre es ahora para que te puedas poner la nueva vestidura que tu Padre celestial te ha dado, ¿qué estás esperando? Dile adiós al hombre viciado y dale la bienvenida a lo que Dios ha preparado y decretado para ti desde antes que nacieras, deja que Su propósito se cumpla en tu vida.
Bajo la guía del Espíritu Santo,
El tiempo de despojarse del viejo hombre es ahora para que te puedas poner la nueva vestidura que tu Padre celestial te ha dado, ¿qué estás esperando? Dile adiós al hombre viciado y dale la bienvenida a lo que Dios ha preparado y decretado para ti desde antes que nacieras, deja que Su propósito se cumpla en tu vida.
Bajo la guía del Espíritu Santo,
Sergio Meza Padilla
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