"Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien" (Josué 1:8).
¿Cómo realmente sé cuál es el propósito por el cual he nacido si no escudriño las escrituras? Todo empieza por leerla, porque al hacerlo, el creyente empieza a conocer los pensamientos y los planes que Dios tiene para su vida. Pero una vez conocemos acerca de ese propósito, Jehová Dios nos exhorta a hacer algo bien particular: QUE NUNCA SE APARTE DE TU BOCA ESTE LIBRO. Y ¿qué nos quiere decir con esto el Señor? Que cada vez que hablemos lo hagamos conforme a lo que escrito está.
Hay tres aspectos bien interesantes que podemos aprender en este día de este texto, ¿cuáles son?:
1. Meditar en la Palabra: según el DRAE, esto significa meditar: aplicar con profunda atención el pensamiento a la consideración de algo, o discurrir sobre los medios de conocerlo. Cuando meditamos en la Palabra queremos conocer más acerca de Dios, pero le pedimos al Espíritu Santo que nos enseñe (Lucas 12:12) y que nos revele lo que escrito está.
2. Guardar la Palabra: implica, no solamente, ser oidores de ella, sino hacedores, es decir ponerla en práctica cada día de mi vida. Y así vivo una vida agradable para Jehová Dios.
3. Hacer conforme a la Palabra: este último aspecto quiere decir que debemos actuar sólo basados en lo que Dios me ordena, ni añadiendo ni quitando o acomodando las cosas a mi favor.
Si cumplimos todo lo anterior viene una tremenda promesa para tu vida, y debo decirte que eso es lo que me gusta de las cosas del Señor, pues Él siempre da una orden, esperando que seamos obedientes, ¿y toda obediencia??? Trae bendición. Y este texto no es la excepción, porque si medito, guardo y hago conforme a la Palabra (1) HARÉ PROSPERAR MI CAMINO y (2) TODO ME SALDRÁ BIEN.
Deseo que empieces este día con la convicción de que si haces estas cosas, así como Josué fue próspero, y todo le salió bien, contigo será igual; la promesa está allí para aquel que cree.
Dios te bendiga tremendamente. Declaro que que tu entendimiento se abre para conocer lo que Dios ha decretado para ti en el Reino de los cielos.
No olvides compartir este mensaje, sé de gran bendición para otras personas.
¿Cómo realmente sé cuál es el propósito por el cual he nacido si no escudriño las escrituras? Todo empieza por leerla, porque al hacerlo, el creyente empieza a conocer los pensamientos y los planes que Dios tiene para su vida. Pero una vez conocemos acerca de ese propósito, Jehová Dios nos exhorta a hacer algo bien particular: QUE NUNCA SE APARTE DE TU BOCA ESTE LIBRO. Y ¿qué nos quiere decir con esto el Señor? Que cada vez que hablemos lo hagamos conforme a lo que escrito está.
Hay tres aspectos bien interesantes que podemos aprender en este día de este texto, ¿cuáles son?:
1. Meditar en la Palabra: según el DRAE, esto significa meditar: aplicar con profunda atención el pensamiento a la consideración de algo, o discurrir sobre los medios de conocerlo. Cuando meditamos en la Palabra queremos conocer más acerca de Dios, pero le pedimos al Espíritu Santo que nos enseñe (Lucas 12:12) y que nos revele lo que escrito está.
2. Guardar la Palabra: implica, no solamente, ser oidores de ella, sino hacedores, es decir ponerla en práctica cada día de mi vida. Y así vivo una vida agradable para Jehová Dios.
3. Hacer conforme a la Palabra: este último aspecto quiere decir que debemos actuar sólo basados en lo que Dios me ordena, ni añadiendo ni quitando o acomodando las cosas a mi favor.
Si cumplimos todo lo anterior viene una tremenda promesa para tu vida, y debo decirte que eso es lo que me gusta de las cosas del Señor, pues Él siempre da una orden, esperando que seamos obedientes, ¿y toda obediencia??? Trae bendición. Y este texto no es la excepción, porque si medito, guardo y hago conforme a la Palabra (1) HARÉ PROSPERAR MI CAMINO y (2) TODO ME SALDRÁ BIEN.
Deseo que empieces este día con la convicción de que si haces estas cosas, así como Josué fue próspero, y todo le salió bien, contigo será igual; la promesa está allí para aquel que cree.
Dios te bendiga tremendamente. Declaro que que tu entendimiento se abre para conocer lo que Dios ha decretado para ti en el Reino de los cielos.
No olvides compartir este mensaje, sé de gran bendición para otras personas.
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